Una experiencia decepcionante. La habitación era más pequeña de lo que esperaba y parecía una sauna, porque el aire acondicionado apenas enfriaba. Además, pensé que al ser un huésped exclusivo, me darían un trato preferencial, pero nada. Al llegar, aún había un chico en mi habitación, ¡increíble! Casi escribo una buena reseña, pero no pude.

La habitación que elegimos era amplia y muy cómoda, con un balcón que daba a la calle. El desayuno era excepcional, con una gran variedad de opciones frescas y deliciosas, además el personal siempre estaba atento a que no faltara nada. La ubicación era perfecta, en un barrio realmente italiano, cerca de la estación de metro Cipro que conecta directamente con el resto de la ciudad y a un agradable paseo del Museo del Vaticano y la Basílica de San Pedro.

El aire acondicionado en nuestra habitación no funcionaba tan bien como deseábamos, lo que hizo que algunas noches fueran algo calurosas.

Acceso a transporte público, habitaciones con microondas, habitaciones con frigoríficos, buena ubicación cerca del Vaticano.

Las paredes delgadas hacen que se escuche todo lo de las habitaciones vecinas. ¡El aire acondicionado es inconsistente y puede ser incómodo en noches calurosas!!! Además, el estacionamiento es al aire libre y parece más una carga que un lujo.

Desayuno que alegró mis mañanas

El desayuno era realmente variado y sabroso. El personal siempre estaba dispuesto a ayudarte, haciendo que cada mañana fuera especial. Me encantó la atención y la calma del lugar.

Desafortunadamente, el aire acondicionado no funcionaba adecuadamente en mi habitación, y las noches resultaron un poco calurosas y mal dormir. Además, había algo de ruido externo que podría ser molesto.

Aprovecha el parking al aire libre, es una buena opción y ahorra en tarifas del hotel.

Nos quedamos en una suite con una terraza increíble y vistas al Vaticano, perfecta para disfrutar de una copa al atardecer. La ubicación es genial, a solo 5 minutos de la estación de metro y 10 minutos de la plaza de San Pedro.

Fue maravilloso, no tengo ninguna razón para quejarme.

La cama era cómoda y el desayuno era increíble, con una variedad sorprendente. Definitivamente regresaría, disfruté sobre todo el café excelente y las pastas caseras.

Me alojé en el Pacific y realmente disfruté. La cama era súper cómoda y el desayuno era variado y delicioso, con opciones como huevos y capuchinos hechos por uno mismo. Además, tienes una parada de autobús justo enfrente, lo que hace que moverte sea fácil. La atención del personal fue excepcional, siempre amables y dispuestos a ayudar.

Lo recomiendo.

La habitación era amplia y cómoda, con un pequeño balcón que daba al exterior. La limpieza diaria fue impecable, y el wifi funcionó perfecto. El desayuno era delicioso y variado, con opciones frescas que realmente me gustaron.

Una selección sólida para una pausa en un viaje largo en Roma con muy buena relación calidad-precio. Los recepcionistas fueron muy amables y nos ayudaron con mapas para explorar la ciudad. Evita las habitaciones que dan a la avenida porque son ruidosas.

Increíble ubicación y habitaciones amplias! Me encantó el pequeño balcón y el trato del personal, siempre atentos a todo. La distancia al metro es solo una caminata breve, lo que hizo todo más fácil.

La verdad, ¡me hicieron sentir tan cómoda que no quería salir! Pero, el aire acondicionado no estaba de mi lado, ¡menudo sauna!

Me encantó la atención del personal, siempre dispuestos a ayudar. El desayuno era completo, con mucha variedad. La ubicación era excelente, cerca del Vaticano, con fácil acceso al transporte público. El barrio era seguro y tranquilo, lo que me hizo sentir cómodo saliendo a explorar.

Las habitaciones eran algo ruidosas, se escuchaba el ruido de las habitaciones adyacentes. El estacionamiento no era cubierto y eso podría ser un inconveniente para algunos.

el desayuno es espectacular con mucha variedad. la habitación era muy pequeña y ruidosa.

Maravilloso, maravilloso, maravilloso.

La atención del personal es fantástica, Alberto en la recepción te hace sentir como en casa. El desayuno buffet es una delicia, una variedad increíble que incluye ingredientes frescos, ¡no querrás perderte el risotto de gambas del restaurante justo enfrente! También, la ubicación es perfecta, a un corto paseo del Vaticano y con la opción de disfrutar de una tranquila caminata al Estadio Olímpico. 🌟

Lo recomiendo encarecidamente 💖🌼

alojamiento perfecto en Roma, el increíble desayuno buffet y la sonrisa de cada miembro del personal hacen la diferencia

La ubicación es excelente, a solo un corto paseo del Vaticano. El desayuno buffet es impresionante, con una variedad deliciosa y el café es un placer. La atención del personal es insuperable.